Una razón para vivir.

La razón acabará por tener razón.

D”Alembert.


La razón humana es una gota de luz en un lago de tinieblas.

Bernard Shaw.


El hombre que escucha la razón está perdido. La razón esclaviza a todos los que no son bastantes fuertes para dominarla.

Cammerson.


Quien al tocar ciertos puntos. o al profundizar ciertas materias, no pierde la razón, prueba que la tiene,

Lessing.


Se puede tomar por compañera la fantasía, pero se debe tener como guía a la razón.

Johnson.


El que quiere tener razón y habla solo, de seguro logrará su objeto.

Goethe.


¡Todos tienen razón y qué poco son los razonables!

Epicteto.


No será la primera vez que me ocurre tener más razón de lo que al principio creía.

André Gide.


He temido siempre indagar a la razón, pero nunca a los hombres.

Mirabeau.


La razón puede resistir desastres, el error no.

Rabindranath Tagore.

140 Frases de James Bond 007

Normalmente pongo las frases escritas pero hoy voy a hacer una excepción

y voy a poner un vídeo.

Las frases están con las voces de los actores originales, 

espero que las disfruten.

Refranes Clásicos (Y)

Y me lo dijo mi abuelo, en cada casa sale un huevo huero.


Ya lo dice el refrán: pasa hambre el que no tiene pan.


Ya que sea, que se vea.


Yo la mato, y tú la tienes en el plato.


Yernos y nueras, en las afueras.


Yacer en el barro es propio de cerdos y guarros.


Y como dejo el convento, me cago dentro.


Yo llevo la contraria. Señores, ¿de qué se trata?


Yo he hecho lo que he podido, y la fortuna lo que ha querido.


Yo soy músico y me acuesto a las ocho.


Ya no bebo vino, porque me cuesta dinero; pero siendo de balde, echa vino tabernero.


Yo me lo guiso y yo me lo como, así no se me ve el lomo.


Y si lo dijo Blas, no hay más que hablar.


Ya que me das el consejo, dame también el remedio.


Yendo y viniendo, lo que había de ser va siendo.


Ya por duro o ya por blando, el labrador siempre está llorando.


Ya puesto en afrenta, lo mismo da cuarenta que ochenta.

Groucherías Marxistas.

Antes de que hicieran a S.J. Perelman rompieron el molde.


Vaya, según parece, un niño de cuatro años es capaz de entender este informe. Corre tráeme un niño de cuatro años.


Estuve persiguiendo a una mujer durante casi dos años sólo para llegar a descubrir que sus gustos eran exactamente como los míos. Los dos estábamos locos por las chicas.


Un árabe y su camello son inseparables. Se dice que un árabe regalaría su mujer antes que su camello. Personalmente, no tengo un camello, pero pienso que es una idea sensacional.


Un hombre solo es tan viejo como la mujer a la que le mete mano.


Cualquiera que diga que puede ver a través de las mujeres se está perdiendo mucho.


La televisión es muy educativa. Cada vez que alguien la pone me marcho a otra habitación y leo un libro.


Conocí a Doris Day antes de que fuera virgen.


O este hombre está muerto o mi reloj se ha parado.


No me siento muy bien. Necesito un médico inmediatamente. Telefonea al campo de golf más cercano.


El aspecto que tiene se lo debe a su padre. Es cirujano plástico.


He pasado una velada maravillosa, pero eso ha sido todo.


Ayer por la noche vi a Joe Di Maggio y no llevaba su uniforme de béisbol.
Me pareció un poco tonto. Supongamos que a mitad de la noche estallara un partido. Para cuando se hubiera puesto el uniforme, el partido ya habría terminado.


No hay más que una manera de descubrir si un hombre es honesto: preguntárselo. Si dice que sí, no lo es.


Jamás olvido una cara, pero en su caso estoy dispuesto a hacer una excepción.

Groucho Marx.

Proverbios Árabes

Un puñado de abejas vale más que un saco de moscas.


Solo se tiran piedras al árbol cargado de frutos.


Los ojos no sirven de nada a un cerebro ciego.


La primera vez que tú me engañes, la culpa es tuya; pero la segunda vez la culpa es mia.


Castigo a los que tienen envidia haciéndoles bien.


Una fabula es un puente que conduce a la verdad.


Al que la fortuna le viste la fortuna le desnuda.


El tesoro que no se gasta se aprovecha poco.


Ese hombre es hombre si puede decir «Soy»; no es hombre el que solo dice: «Mi padre era».


Aconseja al ignorante, te tomará por su enemigo.


Las heridas de la lengua son más peligrosas que las del sable.


La paciencia cosecha la paz y la precipitación el pesar.


Luego que has soltado una palabra, ésta te domina; pero mientras no la has soltado eres su dominador.


El hombre que perdona a sus enemigos haciéndoles bien se parece al incienso, el cual embalsama el fuego que le consume.


El tuerto se apiada del ciego.