No hay persona con menos deseos de aprender que la que nada sabe.
Juard.
Las cualidades vienen de la naturaleza, pero las virtudes son el fruto de nuestra educación.
E. de Gir.
Abrir hoy una escuela, equivale a cerrar una prisión por muchos años.
L. Jourdan.
La paciencia y la dulzura son los medios mejores para la educación de los niños.
Monmarson.
Los buenos ejemplos nacen de la buena educación, y la buena educación, de las buenas leyes.
Maquiavelo.
Un mala educación puede causar la ruina de muchas generaciones.
Brueys.
Si yo pretendo se austero y seco con mi discípulo pronto perderé su confianza y hasta huirá de mi.
J. J. Rousseau.
El que nada sabe, cree enseñar a los demás aquello que acaba de aprender.
Le Bruyere.
Los hábitos de la niñez y la mala educación, se apoderan de nosotros antes de que tengamos tiempo de reflexionar.
Fenelón.
La Escuela publica es el principio de una ciudad.
Vacherot.
El animal sabe cuanto debe saber. el hombre debe aprender todo.
Ballanche.
La educación de la mujer debe de ser la más perfecta, puesto que cada madre, es una Escuela.
Michelet.
jueves, 30 de octubre de 2014
sábado, 18 de octubre de 2014
La Mujer, esa desconocida.
Lo que el demonio no puede hacer, lo hace la mujer.
Anónimo.
La mujer casada es una esclava que es preciso saber poner sobre un trono.
Honorato de Balzac.
Brindo por la mujer, quien pudiera caer en sus brazos sin caer en sus manos.
Ambrose Bierce.
Una mujer bella es un espejo brillantisimo que se empaña al menor soplo.
Cervantes.
Es fácil morir por una mujer. Lo difícil es vivir con ella.
Alexis Carrel.
Nada halaga tanto a la mujer como demostrarle que se le teme.
Benjamin Constant.
Las mujeres que merecen ser amadas son inaccesibles.
Chesterton.
El hombre disfruta de la felicidad que experimenta; la mujer de la que proporciona.
Choderlos de Lanclos.
La mujer escoge, muchas veces, al hombre que ha de escogerla a ella.
Paul Geraldy.
A Eva cuando salió del Paraíso, le dio vergüenza verse desnuda. Claro que de eso han pasado muchos años.
Noel Clarasó.
Las mujeres fieles son todas iguales: solo piensan en su fidelidad y nunca en su marido.
Joan Giraudoux.
No olvidéis que la mujer ha nacido para que la amen, no para que la comprendan.
Garcia Sanchiz.
Cuando una mujer ama a un hombre se le nota enseguida: no sabe hablar de otra cosa.
George Duhamel.
Nada hay tan bueno como las mujeres que no se consiguen.
Karl Huysmans.
La mujer, en el Paraíso, mordió la manzana, diez minutos antes que el hombre, y siempre ha mantenido eso diez minutos de ventaja.
Alfonso Karr.
La mujer adora al hombre, igual que el hombre adora a Dios: pidiéndole algo todos los días.
Jardiel Poncela.
Hay muy pocas mujeres decentes que no estén cansadas de su oficio.
La Rochefoucauld.
Anónimo.
La mujer casada es una esclava que es preciso saber poner sobre un trono.
Honorato de Balzac.
Brindo por la mujer, quien pudiera caer en sus brazos sin caer en sus manos.
Ambrose Bierce.
Una mujer bella es un espejo brillantisimo que se empaña al menor soplo.
Cervantes.
Es fácil morir por una mujer. Lo difícil es vivir con ella.
Alexis Carrel.
Nada halaga tanto a la mujer como demostrarle que se le teme.
Benjamin Constant.
Las mujeres que merecen ser amadas son inaccesibles.
Chesterton.
El hombre disfruta de la felicidad que experimenta; la mujer de la que proporciona.
Choderlos de Lanclos.
La mujer escoge, muchas veces, al hombre que ha de escogerla a ella.
Paul Geraldy.
A Eva cuando salió del Paraíso, le dio vergüenza verse desnuda. Claro que de eso han pasado muchos años.
Noel Clarasó.
Las mujeres fieles son todas iguales: solo piensan en su fidelidad y nunca en su marido.
Joan Giraudoux.
No olvidéis que la mujer ha nacido para que la amen, no para que la comprendan.
Garcia Sanchiz.
Cuando una mujer ama a un hombre se le nota enseguida: no sabe hablar de otra cosa.
George Duhamel.
Nada hay tan bueno como las mujeres que no se consiguen.
Karl Huysmans.
La mujer, en el Paraíso, mordió la manzana, diez minutos antes que el hombre, y siempre ha mantenido eso diez minutos de ventaja.
Alfonso Karr.
La mujer adora al hombre, igual que el hombre adora a Dios: pidiéndole algo todos los días.
Jardiel Poncela.
Hay muy pocas mujeres decentes que no estén cansadas de su oficio.
La Rochefoucauld.
martes, 7 de octubre de 2014
Revoltijo de frases
Un empresario a su hijo: Hijo mío: trata de ganar dinero honradamente, y si no puedes, trata de ganar dinero...
Amo a la Humanidad, lo que me revienta es la gente.
La opinión de un político es más limpia que la de cualquier otro ciudadano: la cambia más a menudo.
Está científicamente comprobado que la cerveza contiene hormonas femeninas, pues luego de algunas cervezas se comienza a decir estupideces, se cabrea uno por cualquier tontería y conduce mal.
Dicho popular: Nunca contradigas a una mujer. ¿Para qué... si a los cinco minutos se va a contradecir sola?
El tabaco no es difícil de dejar, lo sé porque lo he dejado ya mil veces.
Todo el mundo comete errores. La clave es cometerlos cuando nadie nos ve.
No volveré hasta que rectifiquen lo que me han dicho. Que estoy despedido...
Un hombre antes de casarse es un hombre incompleto, pero casado, es un hombre acabado.
El dinero no puede hacernos felices, pero es lo único que compensa de no serlo.
Incluso en el trono más alto, uno se sienta sobre su propio culo.
La persona que puede sonreír cuando las cosas van mal... ha pensado en alguien a quien culpar.
Los matrimonios jóvenes no se imaginan lo que deben a la televisión.
Antiguamente... había que conversar con el cónyuge.
Los últimos serán los primeros, y viceversa. Pero... los del medio, ¿serán siempre los del medio?
El trabajo endulza la vida; pero no a todos les gustan los dulces.
Una buena esposa es un gran consuelo para el hombre en todas las dificultades y contrariedades... que jamás hubiera tenido de haber permanecido soltero.
La experiencia es esa cosa tan maravillosa que te permite darte cuenta de que estás cometiendo un error mientras lo repites.
Nunca me casé porque no tenía ninguna necesidad de hacerlo. Tengo tres animales domésticos que cumplen la misma función que un marido: un perro que gruñe por la mañana, un loro que suelta palabrotas toda la tarde, y un gato que llega a casa muy tarde por la noche.
Oye, ¿tu mujer grita cuando hace el amor? Vaya si grita, a veces la escucho desde el bar.
Si se roban ideas de un solo autor, es plagio. Si se roba de muchos, investigación.
El día que leí que el alcohol era malo para la salud... dejé de leer.
Estábamos al borde del abismo, pero hemos dado un paso adelante.
Maestro, quisiera saber cómo viven los peces en el mar.
Como los hombres en la tierra: los grandes se comen a los pequeños’.
Amo a la Humanidad, lo que me revienta es la gente.
La opinión de un político es más limpia que la de cualquier otro ciudadano: la cambia más a menudo.
Está científicamente comprobado que la cerveza contiene hormonas femeninas, pues luego de algunas cervezas se comienza a decir estupideces, se cabrea uno por cualquier tontería y conduce mal.
Dicho popular: Nunca contradigas a una mujer. ¿Para qué... si a los cinco minutos se va a contradecir sola?
El tabaco no es difícil de dejar, lo sé porque lo he dejado ya mil veces.
Todo el mundo comete errores. La clave es cometerlos cuando nadie nos ve.
No volveré hasta que rectifiquen lo que me han dicho. Que estoy despedido...
Un hombre antes de casarse es un hombre incompleto, pero casado, es un hombre acabado.
El dinero no puede hacernos felices, pero es lo único que compensa de no serlo.
Incluso en el trono más alto, uno se sienta sobre su propio culo.
La persona que puede sonreír cuando las cosas van mal... ha pensado en alguien a quien culpar.
Los matrimonios jóvenes no se imaginan lo que deben a la televisión.
Antiguamente... había que conversar con el cónyuge.
Los últimos serán los primeros, y viceversa. Pero... los del medio, ¿serán siempre los del medio?
El trabajo endulza la vida; pero no a todos les gustan los dulces.
Una buena esposa es un gran consuelo para el hombre en todas las dificultades y contrariedades... que jamás hubiera tenido de haber permanecido soltero.
La experiencia es esa cosa tan maravillosa que te permite darte cuenta de que estás cometiendo un error mientras lo repites.
Nunca me casé porque no tenía ninguna necesidad de hacerlo. Tengo tres animales domésticos que cumplen la misma función que un marido: un perro que gruñe por la mañana, un loro que suelta palabrotas toda la tarde, y un gato que llega a casa muy tarde por la noche.
Oye, ¿tu mujer grita cuando hace el amor? Vaya si grita, a veces la escucho desde el bar.
Si se roban ideas de un solo autor, es plagio. Si se roba de muchos, investigación.
El día que leí que el alcohol era malo para la salud... dejé de leer.
Estábamos al borde del abismo, pero hemos dado un paso adelante.
Maestro, quisiera saber cómo viven los peces en el mar.
Como los hombres en la tierra: los grandes se comen a los pequeños’.
jueves, 25 de septiembre de 2014
Lao Tse. Antes no lo sabia, (Jose Luis Coll)
El buen hombre es el maestro del malo y el mal hombre es la lección del bueno.
Da y tendrás en abundancia.
Cuantas más leyes, más ladrones.
Haz que tu yo sea más pequeño y limita tus deseos.
Saber cuando uno dispone de lo suficiente es ser rico.
Si das un pescado a un hombre hambriento, le nutres durante una jornada. Si le enseñas a pescar, le nutrirás toda su vida.
Tu propio interés te sirve mejor no dejándote llevar por él.
Gobierno imperceptible, pueblo feliz; gobierno solicito, pueblo desgraciado.
Palabra adornada no es sincera.
De dos luchadores, el pensador vence.
Diferentes en la vida, los hombres son semejantes en la muerte.
El que vence a los otros, es fuerte. El que se vence a si mismo, es poderoso. Pero aquel que sabe que no perecerá al morir, aquel es eterno.
Vivir es llegar y morir es volver.
El que todo lo juzga fácil, encontrará muchas dificultades.
Todo pasa; solo la serenidad permanece.
Tan pronto como la prudencia y la perspicacia existieron se vio nacer una gran hipocresía.
Saber creyendo no saber, eso es excelso. No saber creyendo saber, eso es una enfermedad.
Entrar en la vida, ir hacia la muerte.
Da y tendrás en abundancia.
Cuantas más leyes, más ladrones.
Haz que tu yo sea más pequeño y limita tus deseos.
Saber cuando uno dispone de lo suficiente es ser rico.
Si das un pescado a un hombre hambriento, le nutres durante una jornada. Si le enseñas a pescar, le nutrirás toda su vida.
Tu propio interés te sirve mejor no dejándote llevar por él.
Gobierno imperceptible, pueblo feliz; gobierno solicito, pueblo desgraciado.
Palabra adornada no es sincera.
De dos luchadores, el pensador vence.
Diferentes en la vida, los hombres son semejantes en la muerte.
El que vence a los otros, es fuerte. El que se vence a si mismo, es poderoso. Pero aquel que sabe que no perecerá al morir, aquel es eterno.
Vivir es llegar y morir es volver.
El que todo lo juzga fácil, encontrará muchas dificultades.
Todo pasa; solo la serenidad permanece.
Tan pronto como la prudencia y la perspicacia existieron se vio nacer una gran hipocresía.
Saber creyendo no saber, eso es excelso. No saber creyendo saber, eso es una enfermedad.
Entrar en la vida, ir hacia la muerte.
viernes, 12 de septiembre de 2014
Refranes clásicos españoles.
Muchos sujetos deberían estarlo, además de serlo.
No hay hombre tan malo que no tenga algo bueno, ni tan bueno que no tenga algo malo.
Cada uno cuenta la feria como le va en ella.
Tantos hombres, tantos pareceres.
Por lo que uno tira, otro suspira.
A cada uno le place aquello con que nace.
Lo que se aprende en la cuna, siempre dura.
A donde el corazón se inclina, el pie camina.
Soñaba el ciego que veía, y soñaba lo que quería.
Déjame entrar, que yo me haré lugar.
Quien tiene buen anillo, todo lo señala con el dedo.
Con hombre vano, ni en invierno ni en verano.
No se acuerda el cura de cuando fue sacristán.
No hagas mal, que es pecado mortal; ni hagas bien, que es pecado también.
La vergüenza, donde sale una vez nunca mas entra, y la sospecha nunca sale de donde entra.
Quien deja camino y toma vereda piensa que adelanta, pero rodea.
Con arte y engaño se vive medio año; con engaño y arte, la otra parte.
De haber dicho si, muchas veces me arrepentí; de haber dicho no, ninguno se arrepintió.
No extiendas la pierna más de lo que alcanza la manta.
Porque otro se tire de un balcón, no voy a tirarme yo.
Me gusta porque me gusta; me cansa porque me cansa, y no hay mas causa.
El que esté a las duras, que esté a las maduras.
Ríete de todo lo de aquí abajo, y manda el mundo al carajo.
Una vez engañan al prudente, y dos al inocente.
Mas hacen pocos y buenos que muchos que lo sean menos.
No se puede decir nada tan absurdo que no haya sido dicho antes por un filosofo.
Cada cabello hace su sombra en el suelo.
No hay ninguno tan viejo que no piense vivir otro año.
El viejo que cura, cien años dura.
La fortuna a muchos da demasiado, pero a ninguno le da bastante.
La suerte de cada alma, escrita está en su palma.
No hay hombre tan malo que no tenga algo bueno, ni tan bueno que no tenga algo malo.
Cada uno cuenta la feria como le va en ella.
Tantos hombres, tantos pareceres.
Por lo que uno tira, otro suspira.
A cada uno le place aquello con que nace.
Lo que se aprende en la cuna, siempre dura.
A donde el corazón se inclina, el pie camina.
Soñaba el ciego que veía, y soñaba lo que quería.
Déjame entrar, que yo me haré lugar.
Quien tiene buen anillo, todo lo señala con el dedo.
Con hombre vano, ni en invierno ni en verano.
No se acuerda el cura de cuando fue sacristán.
No hagas mal, que es pecado mortal; ni hagas bien, que es pecado también.
La vergüenza, donde sale una vez nunca mas entra, y la sospecha nunca sale de donde entra.
Quien deja camino y toma vereda piensa que adelanta, pero rodea.
Con arte y engaño se vive medio año; con engaño y arte, la otra parte.
De haber dicho si, muchas veces me arrepentí; de haber dicho no, ninguno se arrepintió.
No extiendas la pierna más de lo que alcanza la manta.
Porque otro se tire de un balcón, no voy a tirarme yo.
Me gusta porque me gusta; me cansa porque me cansa, y no hay mas causa.
El que esté a las duras, que esté a las maduras.
Ríete de todo lo de aquí abajo, y manda el mundo al carajo.
Una vez engañan al prudente, y dos al inocente.
Mas hacen pocos y buenos que muchos que lo sean menos.
No se puede decir nada tan absurdo que no haya sido dicho antes por un filosofo.
Cada cabello hace su sombra en el suelo.
No hay ninguno tan viejo que no piense vivir otro año.
El viejo que cura, cien años dura.
La fortuna a muchos da demasiado, pero a ninguno le da bastante.
La suerte de cada alma, escrita está en su palma.
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