El
que abandona a un semejante suyo que esta en peligro, se hace
cómplice de la desgracia que le acontezca.
Ningún
cañonazo ha conseguido abatir unas idea.
El
mejor abogado es una buena causa.
No
es difícil discernir la verdad cuando dos mujeres se acusan:
Las
dos tienen razón.
El
amor mas fuerte y mas puro no es el que sube desde la impresión,
sino el que desciende desde la admiración.
El
adulador es el que nos dice a la cara lo que no diría a nuestras
espaldas.
La
afectación es el deseo de agradar a los pedantes.
El
agradecimiento es la memoria del corazón.
Decid
a una mujer solamente una vez que es bella, y el diablo se lo
repetirá cien veces al día.
El
beso es un intercambio de microbios inconsciente.
Algunas
oficinas son como los cementerios. En cada puerta se podría
escribir: Aquí descansa «Fulano de Tal».
Es
mas fácil hacer historia de una calumnia que de cien verdades, y por
eso aquella tiene siempre historiadores.
Nadie
sabe lo que pesa la carga ajena.
La
caridad del pobre consiste en querer bien al rico.
Muchos
para cubrir sus faltas emplean la caridad.
En
el amor, la cólera siempre es engañosa.
Educar
no es dar una carrera para vivir, sino templar el alma para las
dificultades de la vida.
Una
sola palabra de elogio es capaz de levantar el animo mas decaído.
El
hombre enamorado no lo nota, pero con el tiempo se vuelve idiota.
